Varios testigos que estaban presenciando lo que ocurría en la piscina infantil, le llamaron la atención por estar excediéndose de lo que se puede considerar una actitud cariñosa habitual de un padre hacia su hijo. “Es mi hijo y hago lo que quiera con él, como si quiero matarlo”, fue la respuesta que recibieron los testigos que le recriminaron los actos sеxualеs hacia el menor. @niusdiario
Enviado por PepeViruelas.