La UE está dividida debido a la petición de la Corte Penal Internacional de emitir una orden de detención contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y su ministro de defensa, Yoav Gallant. Algunos países ponen en duda que la CPI deba poner al mismo nivel a los dirigentes de Hamás, a los que consideran terroristas, y a los dirigentes de un Estado democrático y aliado como es Israel. Entre ellos se encuentran Alemania y Austria. @euronews