Lo mismo el calentamiento global infernal que estamos alimentando los malignos humanos, lo que hace es extinguirnos y con ello el planeta evoluciona a algo que le guste más a los ecologistas extintos 😀
Pero vayamos por partes: ¿qué es un cenote? Se trata de un depósito natural de agua dulce, una especie de pozo que normalmente es muy profundo —no se le suele ver el fondo— y que, por encima de todo, tiene algo de místico. Yucatán es, sin duda, el lugar de la tierra donde más abundan estos parajes, y aunque parezcan dispersos al azar, vistos desde el espacio hay un gran grupo que sigue un patrón: un semicírculo que parece trazado con compás.
En la década de 1980, un grupo de arqueólogos estaba estudiando imágenes de satélite de la península de Yucatán para intentar comprender qué había sido de la civilización maya que antaño dominó la península, cuando encontró el patrón inesperado que formaba un anillo de cenotes casi perfecto de unos 200 kilómetros de diámetro. Los indígenas dependían de estos enormes pozos para beber agua, pero la extraña disposición de los cenotes dejó perplejos a los investigadores, que presentaron su hallazgo en una conferencia en Acapulco en 1988. @elconfidencial