Las primarias del PSOE andaluz de junio de 2021 en las que Juan Espadas se impuso de forma sorprendente a Susana Díaz fueron minuciosamente tuteladas desde la dirección federal del PSOE con un mandato expreso de Pedro Sánchez: que se hiciera “lo que fuese necesario” para garantizar el triunfo en ellas del candidato oficial y enterrar de paso el ‘susanismo’. Y así fue: censos inflados con empleados muncipales y familiares, presiones para captar voluntades o el ofrecimiento de obras a aquellos ediles que se cambiaran de bando consiguieron que el entonces alcalde de Sevilla obtuviera el 55% de los votos y una ventaja de casi 17 puntos sobre la expresidenta de la Junta, su principal contrincante, pese a que Espadas era entonces un gran desconocido entre buena parte de la militancia. @vozpopuli
La portada de hoy en ABC…
