Todo ello, debido a que los citados informes concluían que el ingeniero murciano Juan de la Cierva, inventor del autogiro, en julio de 1936, cuando se encontraba en Inglaterra, asesoró a los golpistas en el alquiler del avión ‘Dragon Rapide’. En concreto, para llevar a Franco de Canarias a Tetuán para tomar el control de las tropas del norte de África. De forma que el Ministerio entendía que era incompatible con la ley de Memoria Histórica que el aeropuerto de Murcia incorporase el nombre del ingeniero.

Desde el Ejecutivo murciano han reaccionado así a la sentencia del TSJ: «Es incomprensible que el Gobierno de España llame Juan de la Cierva a sus becas más prestigiosas, y haya plantado batalla judicial para negar a los ciudadanos de la Región de Murcia el derecho a rendirle el merecido homenaje al inventor del autogiro y autor de la teoría del ala giratoria, solo porque haya una parte sectaria del gobierno de coalición empeñado en reescribir la Historia». @elespanol