Se acabará la fiesta, pero la de los ultras. También las causas judiciales con motivaciones políticas, los pronunciamientos de jueces y magistrados sobre asuntos judicializados y los delitos de ofensas contra los sentimientos religiosos. El PSOE ha registrado esta misma mañana en el Congreso de los Diputados una proposición de ley para acabar con lo que el gobierno entiende como un fenómeno inédito protagonizado por sectores extremistas y autoritarios, que no es más que “la persecución y difamación sistemáticas a artistas, creadores, periodistas y adversarios políticos pervirtiendo determinadas herramientas del Estado de Derecho”. Y ha decidido poner freno con una ley que corta los mecanismos del acoso. @eldiario