La doctrina lingüística que impera en Cataluña e impregna a todas sus instituciones se cobra una surrealista víctima. Después de 27 años como clarinetista de la Banda Municipal de Barcelona, el sevillano José Joaquín Sánchez, de 53 años, será hoy despedido por el Ayuntamiento de la capital catalana, que gobierna el PSC, por no haber sido de capaz de acreditar un dominio suficiente de lengua catalana, el equivalente al ya archiconocido nivel C1, el mismo contra el que el pasado año se revolvió la enfermera gaditana antes de ser señalada e investigada por la Generalitat y públicamente hostigada. @elmundo
Muy importante saber catalán para tocar el clarinete, sí… ¿No ahorrarían tiempo poniéndole una estrella de David a todos los que no sepan catalán en Cataluña?