En el caso de Benny y Susanne Anguia, de Salinas, California, a esta hora deben quedar pocas dudas de que tienen un ejemplar que deberíamos clonar para crear una raza de supergatos que dominen el planeta. Su pequeño Rayne Bea, un gato siamés de dos años, se ha convertido en la sensación de Estados Unidos. Ha vuelto a casa tras recorrer algo más que la distancia que hay entre Madrid y París.
Es factible pensar que en algún momento se subió a un vehículo o fue recogido por un conductor que se dirigía a California para realizar parte del viaje, aunque no hay certeza de ello. De hecho, la pareja espera que alguien que pueda reconocer a su gato y pueda ayudar a explicar cómo lo logró. @xataka
Never forget: Titanic with cats.