Los procesos de occidentalización son un tema muy discutido en China, que desde las reformas económicas y de apertura se ha visto cada vez más expuesta a la cultura de los países desarrollados, sobre todo de la norteamericana. De hecho, aunque muchos imaginan al gigante asiático como un país hermético y cerrado a la influencia occidental, lo cierto es que no ha escapado a los efectos de la globalización, y muchos jóvenes chinos están tan al día como sus homólogos americanos o europeos en cuanto a las series, películas o temas musicales más populares.