— Kilgore (@billkilgore_) August 10, 2020
— Kilgore (@billkilgore_) August 10, 2020
Menos mal que aparece alguien y toma las riendas de la situación. El del mazda ya podía haber movido un poco su coche… menudos huevazos. Solo le ha faltado esconderse detrás de la puerta para no salpicarse de sangre…